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domingo, 26 de octubre de 2014

sobre Jorge Siles escritor, diplomático, historiador hijo y hermano (3 presidentes en su entorno) Carlos Mesa brinda un compungido homenaje a la memoria de Jorge Siles Salinas a quién califica de amigo y consejero.

La fe, la más profunda y la más verdadera fe, explica todo lo que Jorge Siles fue como persona, como intelectual, como académico, como diplomático y como político. Fe vivida y trabajada, fe que lo traspasaba de un modo tal que era imposible separar sus convicciones católicas de su norte de vida.
No sólo creyó y dejó esta vida convencido de la trascendencia, tras un largo y doloroso camino hacia la muerte, sino que construyó el edificio de sus compromisos personales y públicos anclado en la reflexión y la práctica de aquello que no se explica, simplemente se vive.
Jorge, que me honró con su amistad y su consejo a pesar del cuarto de siglo que nos separaba generacionalmente, era por encima de todo un hombre de pensamiento. El agua en la que navegaba mejor era en la filosofía de la historia, en la convicción de que todo andar humano tiene un sentido en el que es no sólo posible sino imprescindible mirar la dimensión del espíritu a partir de la razón última de nuestro tránsito terreno. La historia como una forma de permanecer, el devenir cuya brújula está en el entramado ético, sólo explicable a través de la fe religiosa.
A Jorge le tocó vivir momentos dramáticos de transformación y cambio y fue capaz de pensar sobre ellos, resistir, afirmarse en sus valores independientemente de los vientos que soplasen. Es en esa consistencia de valores en la que estriba su grandeza. Pero no porque resistir sea un mérito en sí mismo, sino porque tuvo la fuerza para luchar por aquello en lo que creía en las condiciones más adversas, tanto como sumarse a causas victoriosas que le parecían las adecuadas para hacer de esta sociedad un espacio de convivencia más humano.
En Jorge Siles se halla el infrecuente rasgo de la plena unión entre el decir y el hacer. Recuerdo tantas veces en las que discutimos porque no coincidíamos sobre la valoración de algunos hechos de nuestra historia, porque no creía en el pacifismo ciego, porque estaba tan lejos de la idea del cambio como fórmula mágica para el bienestar; pero ese recuerdo está teñido de admiración por la profundidad de sus argumentos, por la serenidad de su razonar y sobre todo porque, a pesar de ello o quizás precisamente por ello, estuvo dispuesto a compartir conmigo un camino profesional más de una vez, como cuando –director del vespertino Última Hora– me invitó a acompañarlo como subdirector.
Hay un episodio de su vida que hoy me toca más que nunca. Cuando en 1987 aceptó la invitación del presidente Paz Estenssoro para hacerse cargo del Consulado General de Bolivia en Chile, para intentar un acuerdo con el vecino en el tema de nuestra mediterraneidad. Tomó esa decisión a despecho de su posición radicalmente contraria a Paz y a los gobiernos del MNR con los que había sufrido el duro trance del exilio. Entendió entonces algo que se comprendía poco, que por encima de cualquier consideración estaba un doble carácter, el de sumarse a una política de Estado, no de gobierno, y el de asumirse boliviano por encima de sus posiciones ideológicas. La analogía es obvia, pero no la traigo a colación por mi propia decisión personal en un tema equivalente, sino porque creo que allí se probó su entereza ante el vendaval de críticas que recibió de muchos de sus amigos por una lectura equivocada de las razones que lo motivaron.
Jorge fue ejemplar en lo que la palabra entraña, y la prueba de ello está en quienes más lo quisieron. Sus compañeras de vida, María Eugenia, mujer y cómplice de ruta intelectual y ‘Bebé’, quien le dio la fuerza de vivir y compartió plena con él los años difíciles del ocaso. Sus cuatro hijos, mi entrañable y grande amigo Juan Ignacio que tanto tiene de Jorge y sus nietos que –a pesar de ser hinchas del equipo equivocado– sienten por su abuelo respeto y admiración. No es fácil que en un abismo de años y un abismo de miradas diversas en este siglo vertiginoso, los nietos rodeen al abuelo en sus últimas horas y sientan que una parte de ellos se va con quien no perdió nunca el carisma de transmitir ideas con cariño paternal.
No importa si uno comparte o no la misma fe, no importa si discrepa, no importa si hay rasgos del carácter que pueden parecer anacrónicos. Importa una sola cosa, el alma y lo que el alma transmite. Por eso no es superficial decir que Jorge era un hombre bueno, porque eso es quizás lo más importante de todo, lo más infrecuente, lo más valioso. La bondad, tan devaluada hoy, es quizás la parte mayor de la grandeza de cualquiera y su llama se transmite a quienes toman la posta, a quienes la recogen y la llevan dentro de la carne para siempre.
Para el país queda el servidor público, el rector de la Universidad de San Andrés, el embajador, el escritor, el miembro destacado y presidente de academias como la de la Historia y la de la Lengua, el político combativo de “La Aventura y el Orden”, el crítico literario de la literatura del Chaco y el filósofo de “Ante la Historia”. Para mí queda el amigo y el guía cuyo corazón estará, como debe ser, bien adentro de las raíces de Bolivia.

El autor fue presidente de la República
http://carlosdmesa.com/

viernes, 17 de octubre de 2014

muy ilustrativo el texto de Winston Estremadoiro cuando expone el crecimiento del Islamismo en Europa. publicamos su homenaje a Eduardo GalindoGrandchant, al que titula "héroe de ¨Nancahuazú y a Dalia Roca, esposa de Pablo Dermisaky," (Paz en su tumba) texto enriquecedor y muy actual

Un amigo, general de la república él, me dio una mala y otra buena. La una, aciaga digo yo, fue el deceso de mi camarada mostrenco, el Gral. Eduardo Galindo Grandchant; Lalo, héroe de uno de sus éxitos, debería haber estado en la presentación de un libro sobre la campaña de Ñancahuazú, victoria del Ejército boliviano perdida en mesa. Fue días después de conocer la partida de Dalia “Daty” Roca García, pariente nuestra: era de mi esposa por lo Roca, mía por lo García; pareja de vida de Pablo Dermisaki. Fue en la víspera del año de la muerte de mi amigo José María Bakovic, un 13 de octubre de 2013. Tomé mi píldora de la felicidad para evitar la depresión, porque el abuso político y el maldito ‘C’, así, en mayúscula, se alían para truncar la vida de muchos amigos.  
Cuando tenía la pantalla en blanco, la buena nueva de mi amigo fue sugerirme que comparase dos fenómenos de este tiempo, el califato islámico y la hegemonía aimara en Bolivia. El uno es propiciado por insurgentes que abogan por constituir un Estado teocrático en porciones de Iraq y Siria, basado en la interpretación fundamentalista del Corán, la Biblia musulmana. El otro es el surgimiento de zelotes aimaras que proponen una hegemonía étnica en Bolivia.
El primer tema viene sesgado desde ya por noticias de crímenes, por aquí y por allá. Martirizan a personas sólo por ser cristianas, algo que plantea una partición de aguas entre la religión cristiana y el Islamismo: Cristo incita a amarse los unos a los otros para lograr el cielo, mientras que Mahoma dispone que matar a los infieles asegura un lugar en el Paraíso.
¿Quiénes son los infieles? Pues todos los que no son musulmanes.
La profusión de correos referentes a la invasión islámica en Europa no es más que un corolario a lo que alertara Oriana Fallaci a principios del milenio: es un premeditado intento de islamizar Occidente según el Corán, biblia de los musulmanes, cuya interpretación puede variar según sus entendidos, pero apuntando siempre a la conquista por la razón o la fuerza. Hoy despiertan preocupados, aunque ablandados, países europeos para los que la ola islámica se ha vuelto tsunami. La población musulmana ha crecido 30 veces, a dos millones y medio y más de mil mezquitas en Gran Bretaña. Dicen que Francia será república islámica en 39 años; hay más de 300 mezquitas en Paris, y en ciudades como Niza y Marsella el 45 por ciento de los menores de 30 años es de origen musulmán. En Bélgica, 25 por ciento de su población es de origen musulmán y la mitad de los recién nacidos lo son. La cosa es peor en Holanda: 50 por ciento de recién nacidos y en 15 años calculan que la mitad de la población será musulmana. Cuidado España, porque a la independencia catalana seguirá la vascuence, luego un califato en Andalucía.     
Como el cristianismo, el Islam no es monolítico. Igual que protestantes y católicos entre seguidores de Cristo, los islamistas se dividen en sunitas (75 por ciento) y chiíes (25 por ciento): unos y otros claman ser la línea real de ancestro del Profeta, tan irreconciliables hoy como fueron las persuasiones cristianas de antaño, originando guerras en el empeño de convertir adeptos a las buenas o a las malas. El mundo islámico abarca desde el mar saharaui, en el océano Atlántico, hasta el mar de Java, en el océano Pacífico, pasando por el lado sur del Mediterráneo y el lado norte del océano Índico.
Sus más conspicuas naciones serían Arabia Saudita (suní) e Irán (chií), cuyos intereses quizá atizan las fricciones, amén de su abundante petróleo que las financia. La una es mezcla de monarquía absoluta con teocracia suní de la cepa de seguidores del clérigo Muhammad ibn Abd-al-Wahhab, aunque ellos se llaman “salafistas”, en referencia a “la forma correcta de actuar en función a las enseñanzas de píos predecesores”. La República Islámica de Irán es otra potencia hidrocarburífera, la más grande de la persuasión chií. La una en forma solapada, la otra abiertamente, ambas nutren el fenómeno de la ‘Jihad’, (guerra santa) que es “según ellos, la única forma de rehabilitar a los occidentales es asesinarlos
en número suficiente para que su conversión y sumisión sea verdadera y humilde”.  
Reduciendo el sangriento conflicto en el Medio Oriente al tipo de persuasión religiosa y a la geopolítica, es intento de extremistas suníes, rivales de al Qaeda, de revivir un califato islámico, léase teocracia coránica, en territorios árabes que potencias europeas dividieron y se repartieron en el siglo pasado, en lo que son Iraq, Siria y Líbano. ¿Qué es el ISIS, sino el Islamic State in Iraq and Siria de variante suní? Como apuntó Arturo Pérez Reverte, “¡es la guerra santa, idiotas!”
¿Y en Bolivia? Bueno, el fundamentalismo aimara (cosa mala) es deformación extremista de legitimar culturas ancestrales (cosa buena), de las que hay 36 en la nueva Constitución, pero con el aparente designio de que la primera entre iguales, sería la aimara lanzada a conquistar el multicultural país. A revalorizar las culturas ancestrales se opone el resentimiento acomplejado de siglos de explotación: exige tratar cada caso étnico sin idealizar. Aún más perniciosa es la impostura del que habla de un modo y actúa de otro, que los indígenas de tierras bajas pudieran achacar a los que mandan hoy. De toda forma, “el indianismo de este Gobierno es de caricatura”, critica la socióloga Silvia Rivera Cusicanqui. Después del éxito electoral queda la velada amenaza de renovar falaces cambios con imposición étnica en desmedro de todos los ciudadanos.
Ojalá que no sea dando cuerda a extremismos.

martes, 14 de octubre de 2014

provocar a Chile, ser hostil a la Alianza del Pacífico, alineado Pro Cuba y Pro Maduro, Evo usó el engaño de la CPE, para postularse por tres veces, todo "parece a su favor para eternizarse en el poder", opinión de Alvaro Vargas Llosa en los medios internacionales

En 2009 refundó el país con ese propósito y en 2013 hizo que el Tribunal Constitucional interpretara la nueva Carta Magna, que prohíbe más de dos mandatos consecutivos, de tal modo que el primer mandato no se tuviera en cuenta porque aquel era, literalmente, otro país. Ya veremos qué recurso emplea en 2019 para prolongar su mandato más allá de 2020, fecha en que habrá sido el gobernante más longevo de la historia republicana.
De todos los países populistas autoritarios, la Bolivia de Evo es, junto con la Nicaragua de Ortega, el que más estabilidad y hegemonía política ha conseguido simultáneamente. Le sigue de cerca Rafael Correa. Muy lejos están Venezuela y Argentina, donde no se da ni en sueño esa combinación perfecta (en el primer caso hay hegemonía sin estabilidad, en el segundo semi hegemonía con inestabilidad). La razón es obvia: los ingresos por exportaciones, en gran parte gracias al gas natural, han pasado de US$ 1.600 millones a US$ 11.000 millones en una década y el gobierno ha multiplicado por 10 la captación de regalías. Con ese dinero ha utilizado una combinación de métodos persecutorios, intimidatorios o comerciales para reducir a la oposición y mantener a amplios sectores del país en estado de gratitud por los “bonos” de distinto tipo que reparte.
Ha conseguido incluso domesticar a los empresarios de Santa Cruz, sus enemigos más enconados, con quienes pactó en 2013 y que mientras ganen dinero no parecen dispuestos a inmolarse por un propósito político que ven imposible.
A todo ello hay que añadir que Evo ha utilizado astutamente el reclamo marítimo contra Chile. No sólo movilizó el sentimiento nacional con la demanda en La Haya basada en los “derechos expectaticios”: también logró captar/cooptar a adversarios como Carlos Mesa, vocero de la causa.
¿Qué cabe esperar? Por lo pronto, más de lo mismo, sólo que peor: los contratos de gas con Brasil no vencen hasta 2019 (y otro con Argentina, hasta 2027), lo que garantiza unos ingresos suculentos para el gobierno aun en este contexto internacional complicado para América Latina. Da una idea de la distorsión que los hidrocarburos producen en la economía boliviana, que tiene escasa inversión privada, el hecho de que este año ese país sea el segundo en crecimiento en toda la región. La bancada parlamentaria apabullante con la que Morales sale de estos comicios, el control directo que ha establecido sobre los medios de comunicación, la cooptación de muchas organizaciones de base, la desmotivación del empresariado cruceño en la lucha democrática y la división opositora permiten presagiar que Palacio Quemado seguirá siendo una aplanadora.
Ello dará a Evo vía libre para la política exterior que le gusta: la esporádica provocación a Chile, la hostilidad contra la Alianza del Pacífico, la campaña para que Cuba esté en la Cumbre de las Américas y el alineamiento con los dos países populistas cuyos gobiernos están en problemas por la magnitud de la crisis que soportan: Venezuela y Argentina. Esa política exterior, por cierto, no irá demasiado lejos, dada, precisamente, la limitación que imponen a Venezuela y Argentina sus respectivas recesiones y divisiones internas. Para no hablar del revés que sufriría si Aécio Neves logra desalojar a Dilma Rousseff de Planalto y se debilita el soporte que Brasil ha dado a los amigos del Alba en distintos momentos y de distinta forma.
Por eso no quita lo importante: desde Palacio Quemado, Evo otea su propia eternidad presidencial.

martes, 7 de octubre de 2014

Tuto "obligaremos al MAS a una segunda", lo deBrasil es mensaje claro. encuestas se equivocan. "seguridad y fin del narcotráfico" asegura.caravana fue el cierre.

Estamos seguros que obligaremos a una segunda vuelta al Movimiento Al Socialismo (MAS) en las elecciones del domingo", afirmó Jorge Tuto Quiroga, candidato a la presidencia del Partido Demócrata Cristiano (PDC).
El aspirante al Palacio Quemado, dijo que los resultados de los comicios del Brasil,  fueron un mensaje claro  de que  las encuestas al final se equivocan. "Eso nos da una lección a Bolivia; Brasil, es un país que tiene democracia, sin un gobierno que controla los medios paraestatales, sin coerción contra la prensa, aún así las encuestas se equivocaron", afirmó. Comentó que gracias a la percepción de la gente en los nueve departamentos del país, su agrupación política será protagonista en las elecciones.

Afirma que siguen escalando. Asimismo, Quiroga dijo que su partido es el único que sigue subiendo y "otros no paran de caer".
"Si queremos un gobierno diferente, la única alternativa es el binomio Tuto-Tomasa, nadie tiene una propuesta clara como la de nosotros", explicó Quiroga.
Mencionó que su plan es para dar seguridad a los bolivianos y acabar con el narcotráfico.
Además de que la gente pueda tener la libreta de propiedad, producto de los recursos de los hidrocarburos, industrialización, Seguro Universal de Salud, acabar con la corrupción y el derroche.
Apela a la ironía. Quiroga manifestó que no retirará su postulación como mandatario del país. "La única forma que me bajen es llevándome al hotel Las Américas", ironizó el aspirante del PDC, haciendo alusión a las ejecuciones de tres ciudadanos extranjeros  en abril del 2009.
Aclaró que antes desafió a su adversario Samuel Doria Medina, de Unidad Demócrata (UD), de hacer una metodología para establecer quién estaba de segundo y que se bajen el resto.
Sin embargo, 24 horas antes de inscribir las listas de las candidaturas, Doria Medina lo rechazó.
Quiroga le recordó a UD que antes se basaban en las encuestas.
"No somos tontos y desconocemos que Evo Morales escoja quién es la oposición", puntualizó el postulante del PDC.
Cierre de campaña. Por otro lado, el presidencial del PDC junto con sus candidatos a parlamentarios en Santa Cruz, hizo el cierre de campaña con una caravana recorriendo las calles y avenidas de Santa Cruz.
Comenzó en la carretera al norte, luego doble vía La Guardia La Cuchilla hasta la plaza del Estudiante, donde culminó la caravana del PDC comandada por Tuto Quiroga. En el recorrido los candidatos del Partido Demócrata Cristiano recibieron el cariño y las sugerencia de los vecinos de Santa Cruz de la Sierra.
CSUTCB
Lanzan spots contra Jorge Quiroga, de PDC
Proselitismo.  En la última semana de campaña electoral, la Confederación Sindical Única de Campesinos de Bolivia (Csutcb) afines al MAS, lanzan un spots en contra de la candidatura de Jorge Tuto Quiroga.
En el video muestran reuniones del aspirante presidencial del Partido Demócrata Cristiano (PDC) con Gonzalo Sánchez de Lozada, el extinto Hugo Banzer y George Bush, emulando como si fuera el elegido del "imperio yanqui en Bolivia. Qué vergüenza, eso es guerra sucia, difunden el spot con sello de la Csutcb con la plata que roban los masistas para insultar a Tuto Quiroga", afirmó el candidato presidencial. Por su parte, la aspirante vicepresidencial del PDC, Tomasa Yarhui, calificó a los masistas de cobardes.
Apuntes
• El recorrido de la caravana del Partido Demócrata Cristiano (PDC) comenzó desde las 14 horas desde el cementerio de Las Misiones, km 10 carretera al norte.
• la columna de vehículos  del PDC  al mando de Jorge Tuto Quiroga pasó por la Ucebol, sexto anillo y de ahí se trasladó hasta la avenida Radial 27 por el colegio Santa Ana.
• La caravana del PDC se trasladó hasta la avenida Radial 26 y de allí bajó hasta el cuarto anillo zona Equipetrol Norte.
• Siguió el recorrido por la avenida San Martín hasta llegar al hotel Los Tajibos y siguió hasta la Udabol.
• También recorrieron la radial 17 y 1/2, doble vía a La Guardia, barrio Tierras Nuevas, La Cuchilla, barrio Primavera y  avenida San Aurelio quinto anillo, hasta concluir en la plaza del Estudiante.

lunes, 6 de octubre de 2014

Humberto habla de una "segunda vuelta". va quedando claro en la mente del elector. hay dos bolivias. una satisfecha que disfruta del Tesoro de la Nación, otra la de los pobres, los desposeídos, clase media empobrecida, que soporta la desigualdad y la injusticia. dos grupos diferentes y separados.

Si se mira bien, lo que tendremos los bolivianos el domingo 12 será una segunda vuelta. Las opciones nunca habían sido tan claras.
Sean Penn y Jcobo Ostreicher imagen de la extorsión, la injusticia. la Bolivia denigrada
Hay una Bolivia que tiene mucho dinero, tanto dinero que ha hecho que los precios suban hasta niveles que son inalcanzables para la otra Bolivia.
Un taxista de Cochabamba me decía que él ya no puede mantener a su familia con los ingresos que tiene porque no puede actuar en el mismo mercado de consumo que los otros, aquellos que se dedican a actividades ilegales.
Ahora sí que hay dos Bolivias. Llamémoslas como queramos, pero son muy diferentes.
En el génesis de esta diferencia está la definición que me hizo el vendedor de lotería en La Paz: el narcotráfico, jefecito, está haciendo que prospere El Alto, con edificios en todas las manzanas. “Pero yo sigo viviendo de vender lotería porque, jefecito, yo quiero vivir honradamente.”
El problema para el taxista de Cochabamba y el vendedor de lotería de La Paz es que los ingresos que tienen cubren cada vez menos márgenes del consumo de ellos y sus familias.
Y está el narcotraficante de Santa Ana, que llora porque sus dos hijos se han dedicado al consumo de sulfato, y han enloquecido, han destruido sus cerebros y son unas piltrafas, que se juntan con otras en las calles de esa y otras ciudades por donde pasa el Amazonas de las drogas.
O los pilotos jóvenes que mueren, a razón de dos o tres por mes, llevando o trayendo droga en avionetas que se pierden, se queman o son asaltadas por “volteadores” de todo origen y de diferentes uniformes.
Y está el secretario de un colegio de Santa Cruz que denunció la presencia de vendedores de droga en la puerta del establecimiento, y a los pocos días tuvo que renunciar y desaparecer por las amenazas que recibió. Habrá ido a buscar otro trabajo, en el sector de la Bolivia a la que él quiere pertenecer.
Sí, las opciones son muy claras. ¿Qué clase de Bolivia quieres para tus hijos, tus nietos? ¿Quieres que vivan bien de cualquier cosa?
Quizá en la papeleta del TSE no hayan sido marcadas claramente las opciones. Pero todo está muy claro.
No hay dónde perderse. Salvo que tu opción sea la equivocada.

miércoles, 1 de octubre de 2014

las Cinco Libertades que rigen la navegación comercial. publicado en OPINION, el texto de uno de sus colaboradores. se agradece esta deferencia.

Las sociedades actuales se han planteado la interrogante sobre el sistema y la metodología a los cuales recurren los Estados para posibilitar o dar vida a los negocios jurídicos entre los mismos referente al fenómeno más destacado del siglo XX, y lo seguirá siendo el siglo XXI, que es la aeronavegación.

Las Libertades del Aire son los postulados jurídicos que asignan entronque legal a las actuales comunicaciones aeronáuticas, a través de los Convenios Bilaterales, como instrumento jurídico de más alto nivel entre los Estados.

Las Libertades del Aire han posibilitado que se allanen el problemas de la soberanía de los Estados sobre sus espacios aéreos, pues no se podía concebir que aeronaves de diversa tecnología y capacidad efectúen presencia física en los diferentes aeropuertos del planeta sin un contrato vigente o una contraprestación recíproca, entendiéndose que ambos, el contrato y la contraprestación, tienen un carácter subjetivo, amparados por una regla de derecho que sea válida, ante la diferencia de objetivos que ambas partes puedan aspirar. Esta ficción jurídica produce el advenimiento del Convenio Bilateral, el cual, aplicando los postulados de las cinco Libertades del Aire, establece las relaciones en dos Estados para posibilitar un servicio aéreo seguro y regular entre las partes, aspirando simultáneamente un desarrollo cultural y económico, patrocinado por el ejercicio de la actividad de la aeronavegación.

Las Libertades del Aire y sus cinco postulados, a través de la concesión recíproca de derechos, posibilitan la solución de los problemas aeronáuticos de cada país y, lo expresado, confirma ineluctablemente la vital importancia de las Libertades del Aire en el desarrollo aeronáutico entre los Estados.

El lector se adentra a esta solución de un problema jurídico de la soberanía allanada, como se mencionó, con la aplicación de estos enjundiosos postulados jurídicos que rezan:

Primera Libertad. Privilegio de sobrevolar sin aterrizar, que significa la potestad de los países contratantes para discurrir en un espacio aéreo extranjero y cumplir la naturaleza del transporte aéreo, es decir volar en línea recta. Es una libertad técnica.

Segunda Libertad. Privilegio de aterrizar en el territorio de un país contratante sin fines comerciales. Significa que toda aeronave puede aterrizar en un aeropuerto extranjero por razones de seguridad, condiciones técnicas o reaprovisionamiento, que garantiza cubrir las incidencias eventuales del vuelo.

Tercera Libertad. Privilegio de desembarcar pasajeros, mercancías y correo provenientes del Estado cuya matrícula ostenta la aeronave. Significa que un país que tiene un Convenio Bilateral suscrito ejerce esta potestad económica

Cuarta Libertad. Privilegio de embarcar pasajeros, mercancías y carga destinados al territorio del Estado de la nacionalidad de la aeronave. Con esta libertad, que es complementaria de la tercera se realiza el ciclo de perfecto ejercicio comercial de la aeronavegación.

Quinta Libertad. Privilegio de tomar pasajeros, mercancías y correo destinados al territorio de cualquier otro Estado, y el privilegio de desembarcar pasajeros, mercancías y correo procedentes de cualquiera de dichos Estados. Esta libertad que tiene implícitamente dos privilegios es de difícil concesión hoy en día debido a la preservación de los tráficos cautivos de cada Estado que deben ser explotados por sus compañías nacionales.

Interesante es concluir que este esfuerzo jurídico realizado por los juristas de la época fue el que posibilitó el transporte aéreo internacional y su meteórico ascenso e importancia, a tal punto de constituirse en el transporte más moderno, rápido y eficaz a disposición de la humanidad.

no puede ser que "todos contra todos" sea la consigna. lo adecuado sería "todos en contra del continuismo masista" ver el post scriptum. texto de Marcelo Ostria.

Se acerca el fin de esta etapa prelectoral en la que predomina el encono no solo entre las candidaturas oficialistas y opositoras, sino también entre los que se han atrevido a desafiar el continuismo. Es cierto que hay diferencias, pero también es evidente que, pese a ello, se debería enfrentar democráticamente el ostensible empeño de retener el poder a toda costa. 


También se esperaba que esas diferencias entre lo que proponen los candidatos no impulsaran el sectarismo ni abandonaran la lucha común para recuperar los valores democráticos. Los acres cruces verbales entre opositores, que supuestamente comparten la idea de que la democracia en Bolivia se ha desnaturalizado, están postergando la unidad tan esperada por la ciudadanía: es decir, la que debería contribuir a que nuevamente predominen las libertades y derechos democráticos.

En esto de reunir a los afines en política se ha progresado. En el pasado hubo elecciones con una veintena de candidatos; hoy son cinco: un oficialista y cuatro opositores. Pero ahora estos últimos ya están enfrentados, pese a que el desafío urgente y trascendental es hacer que la democracia funcione y que se comprenda que solo es legítima cuando hay respeto –mutuo y convergente– entre la mayoría, siempre circunstancial, y las minorías, lo que ahora no ocurre. La meta era –y debería seguir siendo– superar, en una cruzada unificada de salvación nacional, el continuismo.

En estas circunstancias hay pocas esperanzas de lograr un proyecto unificador que trascienda las elecciones de octubre. Pese a ello, se debe persistir en ese empeño edificante. Será entonces, como dijera Sir Winston S. Churchill, que se revelen como estadistas los que piensan en las próximas generaciones, frente a los que solo miran las próximas elecciones.

Habrá que convenir en que la tarea de reconstruir las instituciones patrias y de garantizar los derechos fundamentales corresponde a los que –unidos– militan en la democracia. La unidad no se consigue cuando todos están contra todos. Los duelos verbales entre los que buscan una meta común no van a resolver los problemas nacionales, ni van a facilitar la concertación que requiere la sociedad, ahora desprotegida por la falta de justicia idónea e imparcial.

Comprender –ojalá no sea demasiado tarde– que la unidad es el camino para recuperar los valores democráticos, ya es un imperativo, y lo será también después de las próximas elecciones, pues estas solo son accidentes en la vida de los pueblos