José Maria Bakovic junto a su esposa y amigos. víctima del acoso evista |
Mi querido Pepe:
Mil gracias por tu mensaje. Aprecio enormemente tu amistad y tu permanente solidaridad, desde el primer día de prisión en que fuiste con lágrimas en los ojos mi primera visita en las inmundas celdas de la entonces PTJ.
Quedé muy emocionado al recibir la carta de mi hija que circuló por internet el día de mi cumpleaños. Me dije entonces que mi Calvario tenía sentido si mis hijos y nietos ven que él es una pobre imitación del de Cristo. Estos son los frutos inesperados y positivos del acoso judicial.
Hace algo más de un mes que tenía unas 45 causas abiertas en mi contra cuando recibí una lista de 27 más, con lo que el total supera las 70. El exceso muestra la insensatez del acoso y, como tu, no me explico el por qué de esta sañuda y sofisticada persecución cuando tienen mucho más tela que cortar en casa.
A pesar de ello, todavía soy optimista. De las causas que quedan activas, las 27 nuevas deberían caer como un dominó por inconstitucionales, las tres de Tarija estan cayendo por falta de fundamentación (sin seguridad de sentencia absolutoria, por supuesto) y las dos de La Paz quedaron estancadas por la prohibición médica de viajes a la altura, además de su insensatez. Ninguna de ellas existiría si se aplicara correctamente la normativa vigente.
Confío en que mis abogadas desbaratarán esta maraña, caso contrario pediré al Presidente que se sirva ordenar a sus fiscales y jueces la cárcel a la que debo presentarme para así detener de una vez por todas esta sangría de fondos al Estado y a mi bolsillo. Mi origen croata es una razón para el acoso como lo demostraron las pancartas armadas para el día de mi primera detención que decían "Turco (por Tito Asbún) y croata son la misma m ....". Todavía no se han dado cuenta que la otra mitad es catalana. De nada sirve para mi verdugos el principio inculcado por mis padres en línea con la parábola de los talentos: devolver todo lo que Dios te ha dado en nuestra querida Bolivia, incluyendo el rendimiento creado.
El nuevo entorno que ha establecido la develación de la "red de extorsión" debiera acabar con la persecución politica, pero esta red no es más que una de las células del gran aparato represivo del gobierno. De mi se encargó una célula del Ministerio de la Presidencia junto con ABC y el SNC Residual, esta última justificando su existencia de seis años, en vez de uno para el que fue creada, al fabricar causas en mi contra como las 27 últimas. Para lograr el trono de Caminos, mis sucesoras lo hicieron mejor que sus mandantes.
Fui el primer preso de este régimen, detenido dos veces ilegalmente para encubrir sus negociados. Son siete años, con 70 causas en 7 departamentos del país, y acabo de cumplir mis 74 años. Espero ahora que se acaben los siete años de tortura y lleguen los siete de esperanza. Entonces perdonaré 70 veces siete.
Estoy agotado, desgastado física, psíquica y financieramente. Son amigos como tu, y muchísimos desconocidos en lugares públicos, que me inyectan la fuerza de la gracia para seguir luchando. Solo pido a Dios que mi sufrimiento sea aceptado como un digno y pequeño aporte a su obra redentora. Debo creer en lo increíble, esperar lo inesperado y amar lo odiado; fe, esperanza y caridad que me ayudan a superar la tortura.
Te saluda el siempre agradecido amigo, José María
Mil gracias por tu mensaje. Aprecio enormemente tu amistad y tu permanente solidaridad, desde el primer día de prisión en que fuiste con lágrimas en los ojos mi primera visita en las inmundas celdas de la entonces PTJ.
Quedé muy emocionado al recibir la carta de mi hija que circuló por internet el día de mi cumpleaños. Me dije entonces que mi Calvario tenía sentido si mis hijos y nietos ven que él es una pobre imitación del de Cristo. Estos son los frutos inesperados y positivos del acoso judicial.
Hace algo más de un mes que tenía unas 45 causas abiertas en mi contra cuando recibí una lista de 27 más, con lo que el total supera las 70. El exceso muestra la insensatez del acoso y, como tu, no me explico el por qué de esta sañuda y sofisticada persecución cuando tienen mucho más tela que cortar en casa.
A pesar de ello, todavía soy optimista. De las causas que quedan activas, las 27 nuevas deberían caer como un dominó por inconstitucionales, las tres de Tarija estan cayendo por falta de fundamentación (sin seguridad de sentencia absolutoria, por supuesto) y las dos de La Paz quedaron estancadas por la prohibición médica de viajes a la altura, además de su insensatez. Ninguna de ellas existiría si se aplicara correctamente la normativa vigente.
Confío en que mis abogadas desbaratarán esta maraña, caso contrario pediré al Presidente que se sirva ordenar a sus fiscales y jueces la cárcel a la que debo presentarme para así detener de una vez por todas esta sangría de fondos al Estado y a mi bolsillo. Mi origen croata es una razón para el acoso como lo demostraron las pancartas armadas para el día de mi primera detención que decían "Turco (por Tito Asbún) y croata son la misma m ....". Todavía no se han dado cuenta que la otra mitad es catalana. De nada sirve para mi verdugos el principio inculcado por mis padres en línea con la parábola de los talentos: devolver todo lo que Dios te ha dado en nuestra querida Bolivia, incluyendo el rendimiento creado.
El nuevo entorno que ha establecido la develación de la "red de extorsión" debiera acabar con la persecución politica, pero esta red no es más que una de las células del gran aparato represivo del gobierno. De mi se encargó una célula del Ministerio de la Presidencia junto con ABC y el SNC Residual, esta última justificando su existencia de seis años, en vez de uno para el que fue creada, al fabricar causas en mi contra como las 27 últimas. Para lograr el trono de Caminos, mis sucesoras lo hicieron mejor que sus mandantes.
Fui el primer preso de este régimen, detenido dos veces ilegalmente para encubrir sus negociados. Son siete años, con 70 causas en 7 departamentos del país, y acabo de cumplir mis 74 años. Espero ahora que se acaben los siete años de tortura y lleguen los siete de esperanza. Entonces perdonaré 70 veces siete.
Estoy agotado, desgastado física, psíquica y financieramente. Son amigos como tu, y muchísimos desconocidos en lugares públicos, que me inyectan la fuerza de la gracia para seguir luchando. Solo pido a Dios que mi sufrimiento sea aceptado como un digno y pequeño aporte a su obra redentora. Debo creer en lo increíble, esperar lo inesperado y amar lo odiado; fe, esperanza y caridad que me ayudan a superar la tortura.
Te saluda el siempre agradecido amigo, José María
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